Dichosas vacaciones, en las que a menudo nos entran a tod@s las prisas por perder peso, para estar más esbeltos, sin tener en cuenta que para perder peso hace falta tiempo y conocimiento de lo que estamos haciendo, todo lo que hagamos sin estas dos condiciones, será forzar nuestro organismo e incluso puede que lo enfermemos de por vida.
Si nos dejamos llevar por esos regímenes alimentarios tan estigmatizados y/o de origen místico…¿Qué es lo que conseguimos?, ¿Dañar nuestra piel?, ¿Dañar nuestros órganos vitales?… y nuestro estado de ánimo porque pasamos hambre, y nuestro estado psicológico, porque nuestros nervios nos terminan dominando, amén de nuestro estómago que sufre una invasión de jugos gástricos, que sólo le van a servir para dañar sus paredes; y por si fuera poco, como restringimos las calorías al máximo, (que a la larga esto se reproduce en la aparición de grasa en el abdomen), en cuanto comamos un simple bocadillo, lo retenemos y nos engorda….preludio de una diabetes; y es que el cuerpo es muy sabio, como le hemos estado castigando con esos regímenes extragalácticos en cuanto empezamos a comer de nuevo, bloquea los alimentos que ingerimos (el efecto yo-yo).
Debemos tener presente que adelgazar con rapidez, nos puede salir muy caro.
Pero como no pretendo ir de nutricionista, y menos de galeno, aquí os dejo un enlace, donde nos explica cómo hacer un régimen sin riesgos secundarios.
Iñaki Kuartango