Joseba lleva unos cuantos años en la enseñanza, y esta es su reflexión tras su primera experiencia con una alumna con diabetes. Estas son unas líneas para traer su reflexión a nuestro blog.
“Dicen que el saber es poder. Pero lo peor del saber es que puede complicarte la vida. Aunque quizás no sea lo peor sino una oportunidad en tu vida para llegar allá donde ni siquiera imaginabas. Así puede pasarte, por ejemplo, con la diabetes o cualquier otra enfermedad con la que no soñabas encontrarte.
“Dicen que hay personas diabéticas pero yo no las he visto nunca”. Así pensaba yo hasta que mi alumna Ane pasó de la noche a la mañana a ser una niña diabética de 9 años. A partir de entoces, una nueva rutina de adueñó de mi vida y de la suya: continuo control del reloj, pinchazos, mediciones, reservas de galletas y azucarillos, miradas de reojo en clase, miedos en el barnetegi…
En fin, en su caso, rutinas convertidas ya en nuevas responsabilidades adquiridas con una madurez admirable, y en el mío, convertidas en certeza de que el saber sobre ello me complicó la vida y me hizo acercarme efectivamente a Ane y afectivamente a quienes hasta entonces eran invisibles para mí”.
Gracias. Joseba.
