Home » Artículos » ¿Miedo yo? SIIIIII

¿Miedo yo? SIIIIII

Desde que debutas en esto de la diabetes, a tu vida se agregan, como compañeros de viaje, muchas cosas nuevas: endemoniados aparatos, bolígrafos con insulina, palabras que jamás antes habías usado (como hidratos de carbono, hemoglobina glicosilada, glucosa, etc.)

imagen cortesía www.varbak.com

imagen cortesía www.varbak.com

Pero también llegan otros acompañantes, a los que yo llamo ”MIEDITOS”. Aquí van algunos de los míos:

Miedo a las primeras hipoglucemias. Tras algunos días descubriendo que era esto de la diabetes (debuté con 30 años), estaba muy preocupada, por que llegado el momento de mis primeros bajones, no fuera capaz de sentir y reconocer las señales, de las que tanto me habían hablado. Así que durante mucho tiempo, al menor síntoma, sacaba a pasear mi glucómetro. Con el tiempo, todo se normaliza y muchas veces no necesitaría ni hacerme otro agujerito en mi dedo, para saber que tengo el azúcar bajo. Ahora mi miedo, es el de no notar los bajones.

Miedo a hacer algo por primera vez, que se salga de lo habitual (deportes, viajes, etc.). Enseguida te das cuenta que siempre tienes que ir por delante de todo lo que vas a hacer: preveer es la única forma de ahorrarte sustos. Aunque al principio resulta algo laborioso, con el tiempo y la práctica, se convierte en algo de lo más normal. Hace unos años, en una quedada de diabéticos, organizada por la Asociación, conocí a un chico, diabético desde niño, que nos contó que él no iba nunca al monte (aunque su cuadrilla lo hacía habitualmente) sencillamente porque le daba miedo lo que podía pasarle. Sorprendente.

Miedo a  los bajones nocturnos. Quien no se ha despertado una noche empapada en sudor, a las tantas de la madrugada. El cuerpo te pide quedarte en la cama y sin embargo, debes mirarte y darte una vuelta rápida por tu “despensa”. Encima deprisita, porque en mi glucómetro, las mediciones más bajas, son en estos bajones. Con esto me pasa siempre lo mismo, mientras que en los bajones durante el  día, puedes encontrar una lógica: calculaste mal los hidratos, te pasaste de insulina, pecaste, te moviste mucho, etc. En el bajón nocturno, rara vez puedo dar respuesta al ¿por qué? Otro misterio para Iker Jiménez.

Miedo a una hipoglucemia severa. Yo creo que este es el miedo entre los miedos, que la mayoría de los diabéticos tipo 1 tenemos. A quien al conocer el reciente fallecimiento del  joven de Huesca, por una hipoglucemia severa, no le ha recorrido un escalofrío por el cuerpo. Principalmente porque sabemos que cuando pase, necesitaremos que la suerte esté de nuestro lado. Yo viví uno hace unos años, subí a mi bus habitual, el que todos los días me lleva al trabajo, era invierno y hacía mucho calor, para cuando me quise dar cuenta de que aquel calor no era solo de la calefacción… apurada, lo primero que hice fue tomarme un azucarillo, es lo último que recuerdo. Un buen rato después “volví”, completamente desorientada, alucinada, asustada. No reconocía lo que veía por la ventana de mi bus, no sabía dónde estaba, que había pasado y mi cabeza no ayudaba mucho.  Recuerdo aquellos momentos con terror.

Todos deseamos vivir con normalidad, aunque tengamos como fiel compañera a la diabetes y sus cositas.

Que quien sea… reparta suerte.

Tótem

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *