Faltan 2 días.

Naroa representa en la actualidad a los monitores de la Asociación en la junta. Está trabajando detrás de las colonias y actividades de niños. Trabajadora hasta decir basta, como todos los monitores a los que tenemos tanto que agradecer. Y también con algo que parece contagioso en este equipo, la sonrisa siempre presente, además de su cercanía y facilidad para contactar con nuestros peques. Para que luego hablen mal de los jóvenes... otro ejemplo a seguir. A tan solo 2 días del día Mundial, nos da esta visión en positivo de la diabetes.

MI PEQUEÑO GRANITO DE ARENA.

Hola a todos y todas, me llamo Naroa y tengo 22 años. Soy Diabética desde hace… puf! Muchísimo tiempo… je, je, 16 años ya!

La verdad es, que desde el principio lo he llevado muy bien, aunque como cualquier niño también tuve alguna que otra rabieta de… ¡no me quiero pinchar!, ¡no quiero comer!, ¿Por qué soy diabética yo y mis amigos no?… Bueno, esto es pasajero y todos o casi todos pasamos por ello.

Pero desde luego, de las cosas que más me ayudaron fue la Asociación. Recuerdo que a la primera excursión que me apuntaron mis padres, tenía 7 años, no quería ir. Les pedí una y otra vez que por favor no me mandasen que no conocía a nadie… Pero allí conocí a muchísima gente, aprendí mucho sobre la diabetes y me lo pase genial. Desde entonces no me perdí ni una excursión ni un solo campamento. Y es que no sé cómo serán otros campamentos pero aquí te sientes como en una gran familia, todo el mundo entiende tus problemas y puedes compartir muchas experiencias que la gente comprende y te da consejo.

Hoy en día, soy monitora de la Asociación. No lo hago solo porque me gusta, también por devolver de alguna manera lo que otra gente hizo por mí y los de mi generación.

Sin ellos, hubiesen sido imposibles los maravillosos años de campamentos, las experiencias vividas y los grandes amigos hechos allí. Muchos de los cuales todavía conservo y estoy segura que conservare por mucho tiempo.

Por lo tanto, estoy muy orgullosa del trabajo que hacemos con los chavales, dándoles la misma oportunidad que nos dieron a nosotros en su día.

Resumiendo un poco, lo que quería decir es, que a mí el hecho de ser de ser diabética no me ha impedido hacer nada. He hecho lo mismo que todos mis amigos: salir, ir de excursión con el colegio, de vacaciones, practicar rafting, escalada… mil cosas…

Todo lo contrario, muchas veces, pese a lo joven que soy, valoro las cosas que he conseguido, que he hecho, como soy… y pienso que sin conocer a toda la gente que he conocido a través de la diabetes y sin las cosas que he vivido por el hecho de tenerla… igual no sería la misma.

Dicho esto, evidentemente tiene sus cosillas ser diabético, pero cada uno tiene las riendas de su vida y si aprendes a convivir con ello al final te puede aportar cosas buenas!