Home » Artículos » Los buenos deseos de Año nuevo

Los buenos deseos de Año nuevo

PromesasAntes de meterme en harina quisiera desearos a todos vosotros una muy feliz entrada de año, y que al menos podáis seguir manteniendo todas esas buenas cosas (recuerdos, historias, status, personas, …) que disponéis a vuestro alrededor y que paradójicamente tan solo valoramos cuando las echamos más en falta…

Pocas son las personas que nos acordamos de todo lo bueno que contiene nuestro baggage pero sin embargo habitualmente cuando soplamos las velas de nuestra tarta de cumpleaños, o cuando alguien nos pide que deseemos algo, o cuando suena la 12ava campanada del 31 de diciembre siempre caemos en mayor o menor medida en desear aquello que no tenemos, aquello que deseamos y que por circunstancias aun no se encuentra a nuestro alcance…

 ¿Qué es lo que hace que no se valore como merece aquello que catalogamos como “nuestro” y que relevamos a una 2ª posición?

Qué curioso y a la vez insólito resulta comprobar que en muchos casos los regalos de años anteriores se pierden en la noche del tiempo, que insólito desear algo tan común como un abrigo y no acordarse siquiera de la persona que convive contigo, de tus padres, hermanos, hijos… si claro, me acuerdo mucho de mis familiares cuando me gasto la paga extra navideña en regalarles esos objetos caducos pero y, ¿Cuánto tiempo, cuanta salud, cuanta alegría a su lado puede comprarse con esa misma paga extra?

 Llegados a este punto hay dos noticias que podemos confirmar: El tiempo que tenemos para poder compartir junto a alguien todo lo que queramos es finito, tiene fin y desde luego jamás sabremos de cuánto tiempo se trata, y desde luego tampoco lo encontraremos accesible en ninguna boutique de moda ni siquiera en los mejores grandes almacenes, ni a precio de lujo, ni  a precio de saldo…

 Hagamos un acto de fe, sincerémonos un poco… ¿Cuántos hemos sido los que hemos regalado un enorme beso y/o abrazo a nuestra madre, a nuestra pareja, hijo, hija o persona que hemos tenido la suerte de toparnos en nuestra vida, y como agradecimiento a todo lo que incondicionalmente nos ha dado y nos sigue dando?, alguno habrá incluso que justifique el no haber demostrado ese cariño escudándose en que se encuentra solo, en que está en un lugar remoto, en las antípodas de lo que se entiende por familia o agrupación de gente que se reúne porque se quiere pero, entonces y pensando egoístamente ¿qué hace por sí mismo para tratar de mejorar esa situación? Para mí no hay cosa peor que encontrarse en la soledad sin poder compartir ese tiempo del que disponemos.

 Inherentemente y tras esta introducción, ¿habremos puesto en práctica algunos de los buenos deseos que año a año nos proponemos cumplir? Quien más, quien menos conoce los temas mejorables dentro de su ámbito, conoce sobradamente que podría dejar de hacer y dispone de ánimo y fuerza suficiente como para comenzar los nuevos proyectos esbozados…

 Yo os animo a todos vosotros a que seáis exquisitamente ‘cabezones’ con este tema, con el de los buenos propósitos, con los buenos deseos que desde luego si ha servido para motivaros dentro de todo este “totum Revolutum” que es el vivir a fecha de hoy en nuestra actual sociedad, tiene una pinta más que estupenda para que persistáis y lo vayáis consiguiendo… en el peor de los casos sospecho que os quedaríais igual, pero al menos tendréis la certeza de que lo habréis intentado con toda vuestra fuerza.

Dentro de todo este ‘saco’ de buenas intenciones encontraremos propósitos tan clásico como el de dejar de fumar, el pagar la matrícula de algún Gym para perder esos kgr de mas acumulados, e incluso haya quien prometa el ser algo más tolerante con los semejantes que le rodean, vamos a hacer lo imposible para aportar a la gestión del control glucémico nuestro granito de arena, un granito puesto con todo nuestro cariño y buen hacer por poner algún ejemplo relacionado con nuestro tema estrella

Vamos a tratar de ser sinceros, de ser persistentes, de tener los pies en la tierra y dejar de ser los típicos y prejuiciosos seres humanos, vamos a cumplir con lo que nos propongamos para llegar, y ¿a dónde? A donde deseamos estar: Junto a las personas que queremos y por el máximo de tiempo que podamos.

Últimamente y cuando me pierdo entre las montañas lejos de las grandes urbes pienso en lo que nos mueve a todos los que nos encontramos realizando alguna actividad deportiva a esas horas tan impetuosas, con esas temperaturas tan ‘ásperas’ y sobre un terreno que en apariencia parece reacio a que nadie discurra por sus senderos… de nada sirve conocer que es lo que nos motiva a hacerlo, el caso es que como buen deseo yo os sugiero que os busquéis vuestra motivación.

Hacedlo por la consecución de una meta, hacedlo por la consecución de un tiempo record, por una buena causa, por esos kgr de más que hemos ido ganando, porque el entorno es estupendo, porque la temperatura acompaña, porque no os apetece, porque si os apetece, para luciros, para conocer mejor vuestro entorno, para ser un poco más saludables, para usar menos insulina / menos antidiabéticos orales para la gestión de vuestra diabetes, para que podáis disponer de más tiempo y de mejor calidad para que podáis regalárselo a vuestros seres más queridos y que indudablemente se lo merecen.

Creo en todo esto que os he comentado y espero que en vuestro fuero interno podáis encontrar esta motivación que os dejará un buen sabor de boca en cuanto os confirmen que en efecto sois lo más preciado para esa/esas persona/s tan especiales con las que compartís la vida que tenéis.

No descuidéis vuestro status, apostad todo lo que tengáis por una vida saludable y tratad siempre en realizar lo que esté a vuestro alcance y paciencia, que trabas como las meigas, “haberlas haylas”.

Con esto y un bizcocho… tratad de ser felices este año recién estrenado, larga vida y prosperidad.

Beñat Souto

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *